1. Decide el estilo de tu boda: Es
primordial tener claro la hora, la temporada del año y el lugar de la
boda para saber cuál es el estilo de vestido de novia que es más
recomendable. Por ejemplo si tu boda es en primavera o verano, o si es
de día o de noche. Tu vestido ante todo debe ser cómodo.
2. Planifica la compra con antelación: Se
recomienda que al menos seis meses antes de tu boda hayas hecho la
elección del vestido. Puedes comenzar a ver revistas especializadas o
visitar en internet sitios de reconocidos diseñadores de donde puedas
sacar alguna idea, buscar catálogos o tiendas online.
3. Compra en una tienda de confianza: Busca tiendas de vestidos de novia con buena reputación y tradición y sobre todo experiencia.
4. Haz una compra inteligente: El
día de tu boda es el día más importante, déjate asesorar por personas
de tu confianza que te conozcan y te recomienden que es lo mejor para ti
en tu gran día.
5. Compra en horas poco concurridas: Lo
mejor es ir a las tiendas de novia un día cualquiera de la semana,
evitando los fines de semana, así podrás recibir una mejor atención.
6. Establece un presupuesto: Planea con tu familia o tu novio el presupuesto destinado a tu vestido de novia, y adapta tu elección.
7. Importante: El día que
vayas a comprar tu vestido de novia, recuerda que cuando te lo pruebes
debes llevar ropa interior adecuada, y el zapato que vayas a usar o uno
de una altura similar.
8. Que se ajuste a ti: Por
norma general, una o dos pruebas son suficientes para ajustar tu
vestido de novia. Es importante que estas pruebas sean en fechas
próximas a tu boda, por los posibles cambios de talla que puedas sufrir.
El vestido debe ajustarse a ti y debes sentirte cómoda con él.
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